Etiquetas

, , , , , , , , , , , , ,

black nanny with white baby

Estoy considerando las diferencias entre el panteísmo y el panenteísmo. El primero le está prohibido a los cristianos y por supuesto a los católicos, el segundo al parecer no lo es. Siempre me he considerado panteísta secreta, debido a la creencia de que Dios estaba en todas las cosas, y todas las cosas eran de Dios, pero en el capítulo 6 del maravilloso libro de  Matthew Fox, Original Blessings (bendiciones originales), Fox habla del panenteísmo como el experimentar al Dios diáfano y transparente. Tengo que admitir que tal vez yo he estado usando la palabra equivocada para la misma experiencia.

De Meister Eckhart, viene lo siguiente: «Dios creó todas las cosas de tal manera que no están fuera de sí mismo, como la gente ignorante se imagina. Por el contrario, todas las criaturas fluyen hacia el exterior, pero no obstante se mantienen dentro de Dios”.

Pablo dice en Hechos 17:28: «En Dios vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser». Pablo es uno de los poetas de la Biblia, y aunque estoy usando la Biblia incluyente, y siempre he modificado las oraciones para expresar lo de que varón y hembra los creó ella, tengo que admitir, como poeta, un amor por la traducción inglesa del Rey Jaime. Varón y hembra los creó ella. Las nuevas traducciones podrán ser más incluyentes, pero no siempre son tan hermosas. Seguramente las palabras hermosas son valiosas, resonando en la tierra y en los cielos. El salmista dice en el 100: «Haced un ruido alegre al Dios, todas las tierras. Servid a Dios con alegría: Venid ante su presencia con regocijo. Sabed que Dios es La que nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; somos su pueblo y las ovejas de su pasto. Entrad en sus puertas con acción de gracias, y en sus atrios con alabanza: estad agradecidos a ella, y bendecid su nombre. Porque Dios es buena; su misericordia es eterna; y su verdad persiste por todas las generaciones». Y no olvidemos a Jeremías, que dice, en 44:25: «Así dice… el Dios de Israel: Vosotros y vuestras mujeres han logrado en hechos lo que declararon en palabras, «estamos decididos a… hacerle ofrendas a la reina del cielo y derramarle libaciones.’ ¡Por todos los medios, háganle ofrendas y derrámenle libaciones!”.  

Podrán haber notado que me he tomado algunas libertades con las palabras del salmista, pero he estado pensando mucho acerca de que “varón y hembra los creó ella.” Tuvimos noticias el 4 de febrero de un viejo sacerdote que estuvo muerto durante más de 40 minutos y que se encontró con la Dios mujer, la Dios madre, mientras estaba teniendo su experiencia cercana a la muerte, por lo que pienso que me puedo tomar algo de margen con mis palabras. De todos modos, ya hace muchos años que en mi cabeza, cuando repetía las oraciones de mi infancia o de la adolescencia, cambiaba los nombres a mi nombre, a “ella”, al igual que el pediatra y activista Spock lo hizo durante tantos años. Así que es ella la que habita en el lugar secreto del Altísimo, y le he estado orando a Dios padre y madre durante todos estos años.

Catholic priest near death experience

Ayer mientras consideraba una foto que mi buen amigo Ronald Yates público en los medios de comunicación social de una mujer amamantando a un bebé, la mujer de raza negra y el bebé de raza blanca, probablemente tomada en un momento en que a la madre no se le habría permitido sentarse en el mismo mostrador de comidas con el niño cuando éste hubiera crecido, me di cuenta de que tan horrible como son y fueron la esclavitud y el racismo, el peor pecado es el pecado de la misoginia. Esto se debe a que es una negación de la madre, una negación de la vida, ya que es a través de la madre que la vida viene a cada uno de nosotros. Cuando negamos el principio femenino y pretendemos que lo mejor y lo más importante y valioso es sólo el principio masculino, realmente estamos causando estragos en el universo.

Llamamos malo a lo oscuro; incluso en la descripción china del yin y el yang, el principio masculino es brillante y positivo, mientras que el principio femenino es oscuro y negativo. Aunque hemos aprendido del estudio del electromagnetismo que lo positivo y lo negativo son sólo una forma de describir dos polos separados, dos direcciones, en nuestro mundo se toman como válidos y no válidos, buenos y malos, preferibles y no preferibles. Si usted es lo oscuro y lo negativo, tendrá una validez menor y no tendrá autoestima. ¿Quién querría en esta sociedad nuestra ser “menos que”? ¿Quién la oscuridad y lo negativo? Así que le faltamos el respeto al planeta, a la madre Gaia, porque ella cultiva la materia de la vida en la tierra, que es sucia y oscura y encantadora. Algunas de las prácticas en que he incursionado prácticamente niegan la oscuridad. Todos nuestros adjetivos para describir la oscuridad no son tan preferibles como los que utilizamos para describir lo que brilla, y podemos entender una obediencia al sol en lugar de a la luna menor. Soy hija de la luna. En la oscuridad sueño todos mis sueños de ser, en la oscuridad me estoy reparado y con la recuperación me vuelvo más de lo que soy, una criatura hembra,  una diosa, sí, una poetisa, sí, y tendré que inventar palabras nuevas e incluso utilizar esas palabras que yo mismo he censurado porque si usaba la forma femenina, de alguna forma significaba que era algo “menor que”. (Y Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? Juan 10:34)

Aunque feminista, cometí el error cuando era más joven de tratar de obtener lo que las criaturas de sexo masculino tenían, pero quiero hoy reclamar para mí misma mi energía como criatura femenina, quiero decir que yo ya no soy una poeta, sino una poetisa, soy una criatura de la oscuridad, del vientre oscuro del planeta, de donde surge toda la vida.

Ya he hecho algunos de los trabajos preliminares, porque yo fui feminista antes de que usáramos la palabra, ya que de niña preguntaba el porqué de los lamentos de mi madre que quería haber nacido hombre. Se preguntaba a menudo cuando estaba barriendo o lavando los platos, o cualquiera de las otras tareas interminables e ingratas de las amas de casa de todo el mundo, ¿por qué había nacido mujer? Y cuando estaba volviéndome adulta, me aconsejaba que fingiera que no era lista, porque no sería capaz de atrapar a un marido. El hombre quería compañeras bonitas y endebles, y no mujeres demasiado intelectualizadas que podrían hacer que se sintieran menos inteligentes.

Cuando viví con Jim, el amor de mi vida, uno de nuestros amigos más jóvenes una vez le preguntó qué era lo que él buscaba en una mujer. Él respondió breve y rápidamente que lo primero que quería en una mujer era la inteligencia, porque de lo contrario ¿cómo podría hablar con ella? y lo segundo era la bondad y que si un hombre daba con las dos cosas, estaba hecho. Nuestro joven amigo se echó a reír, no sé si a partir de la comprensión, pero me sentí inmensamente alegre ante la respuesta de Jim. Nuestra vida juntos estuvo siempre llena de abundancia ilimitada, y no me refiero en el área financiera. En esa maravillosa oración, que llamamos el Padre Nuestro en nuestro idioma, y que Dominic Crossan llama la  oración más importante y más extraña del cristianismo, un manifiesto revolucionario, le pedimos que nos dé hoy nuestro pan de cada día. Esta es una petición alegórica para todo lo que necesitamos, un ruego de prosperidad, y la prosperidad lo es todo, el pan y el amor y la ayuda y el  planeta hermoso y el compañerismo que necesitamos. Las antiguas lenguas eran mucho más poéticas en su uso de la metáfora, pero para mí, encontrar a Jim, amarlo y ser amada por él, fue de hecho mi abundancia ilimitada. Camina conmigo todavía. Danos, de hecho, nuestro pan de cada día.

En cuanto a la madre lactante de raza negra, en esa época de la esclavitud y el racismo, la utilización de una mujer de raza negra para lactar a un niño blanco tiene sentido en términos de la misoginia de aquellos tiempos, el sexismo de la época, con los cuales no hemos terminado, ya  que se trata de una plaga sobre la tierra madre. Ella era, como todas las madres, una bestia de carga. En nuestros tiempos modernos de consumo, se ensalzan las virtudes de las mujeres y las madres una vez al año, como excusa para fomentar una mayor compra por parte de los consumidores. No les importa nada de virtudes, lo que buscan es la ganancia.

Lo que las madres necesitan es más visitas, más charla, más atención, en cada etapa de su trabajo y de su esfuerzo como madres. Si hubiera más consideración y atención a esta obra tan importante, no tendríamos la necesidad de atención psicológica cuando, a medida que envejecemos, tenemos que lidiar con los traumas de la relación madre-hijo. Pero cuando tenemos un género entero, el género responsable de dar a luz a la humanidad, que se ve constantemente abusado, maltratado, denigrado y desatendido, nace una infección purulenta que se afianza en ese mismo pecho que produce la leche, ya que ella no es nada si no un juguete para el animal macho, y ella debe ser sexual y siempre de un comportamiento pizpireta y apropiado. Así se pone implantes mamarios y se hace liposucciones de abdomen y borra sus líneas de la edad y le hace cosas a sus nalgas. Podría incluso colorear y enderezar o encrespar su pelo; su trabajo para hacerse más hermosa nunca termina. Y su trabajo no es valorado en todo caso, sus habilidades y sensibilidades no son de interés para los que la rodean. Ella vive de un ataque de depresión a otro. Si ella es violada es culpa propia si ha nacido con poca belleza natural, sea lo que sea, sólo que en nuestro mundo es la belleza sexual de la que estamos hablando, que tiene que ver con las directrices estrictas de la blancura y la delgadez y la juventud, quizás se vea aún más limitada en sus oportunidades, otro sueño diferido, como dice el poeta.

Y a medida que envejecemos, nos volvemos aún más invisibles. A medida que subimos algo de peso y nos volvemos menos agraciadas, ya que el cuerpo comienza su decadencia natural a la siguiente fase, no somos sólo invisibles sino el blanco de las bromas, de las miradas desagradables y de la discriminación. La invisibilidad es a veces un interesante complemento de la vida. La verdad es que una mujer mayor y algo gorda probablemente pudiera cometer un delito sin que nadie se diera cuenta, porque no se la ve. Ella puede entrar en lugares y meterse entre las cosas, porque no está realmente allí. Los ojos de los jóvenes ya no ven a los más viejos. En las sociedades anteriores y especialmente en otras culturas, hubo un atesoramiento de la edad, pero en nuestro mundo de consumidores, la edad avanzada significa que ya no se es productivo. Como peones de la maquinaria corporativa, una vez que no se es productivo, se nos puede relegar al basurero como inservibles.

Volviendo al panteísmo y al panenteísmo, diré con Carl Jung que una de las maneras de perder el alma es adorar a una Diosa fuera de uno. La diosa está adentro, y yo no soy creyente del dualismo. Creo en la unión mística con todo lo que es, el principio masculino y femenino. Tenemos que trabajar para unir a lo positivo con lo negativo, al macho y la hembra, a la oscuridad y la luz. Sólo entonces podremos ser capaces de salvarnos a nosotros mismos y a nuestro planeta, hombres y mujeres todas.

Namaste, mis hermanas y hermanos.